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                  | acrílico sobre tela / Esta serie es una reflexión sobre el tiempo y la mirada.
Hay momentos en el que el tiempo se detiene y que percibimos nuestro entorno y sus detalles, como eternos.
Haikus donde la poesía y el misterio se develan.
Imágenes idílicas de la naturaleza. Ramas, brotes, flores y pájaros mudos que observan… Solo algunas abejas se atreven a interrumpir esa quietud.
Mirada detenida, silenciosa, apacible que dura poco…
El vértigo gana la partida. Las formas se desdibujan, los detalles desaparecen, el paisaje, ahora vertiginoso, se vuelve fugaz.
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